27 ago 2008

¿Y como hablo de amor, si estoy muerto?

¿Hay cosa más absurda que escuchar a un cadáver

hablar apasionadamente como un humano,

si no puede sentir el calor ni el frío

ni el placer ni el dolor o el llanto?

Es horrible ser un muerto entre los humanos.

Ser el muñeco con quien representan una parodia absurda

Los psicópatas esquizofrénicos vivos

Que disfrutan con la visión de cadáver putrefacto.

Embadurnado de excrementos, babas y locura

Al que con asco y saña, impertinentes, siguen limpiando.

Y pide liberarse, el cadáver, de entre los vivos locos,

Pero éstos no entienden los silencioso gritos de los muertos.

Y con patético ensañamiento lo siguen animando:

Cuenta, muerto, tu historia de lo que estás pasando;

Parece que eres uno de nosotros, los vivos,

Aún aparentas algo de ser humano.

En vano les digo, ¡que no!, ¡que estoy muerto!,

Que ya no puedo hablar igual que ellos

Porque me resulta absurdo hablar igual que los humanos.

Y no me dejan ser ni muerto ni vivo

Estos locos y alucinados desquiciados.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Ey preciosidad, me gusta lo que escribes, me gusta lo que coges de algunos libros, relatos o incluso peliculas, como estas, porque todo ello, junto a tu bonita imaginacion y tus textos extraordinarios, te definen perfectamente. Un abrazo